Barcelona, 3 de abril del 2024.- Así lo demuestran las cifras registradas en enero y febrero del 2024, según ha informado IATA:
Según información publicada por el diario El Mercantil, el incremento del 11,9% en el segundo mes del ejercicio, junto al del 18,4% registrado en enero, “podrían llevarnos a una demanda que supere los niveles excepcionalmente altos de inicios de 2022” en los próximos meses, se ha atrevido a augurar el director general de la entidad, Willie Walsh. De hecho, las toneladas-kilómetro acumuladas en estos dos primeros meses -40.500 millones- sólo quedan el 0,3% por debajo de las que se registraron en ese arranque de 2022, y el 15% por encima de un 2023 más enmarcado en la normalidad del sector. Estos datos sugieren, según IATA, “que con la bajada de niveles que se vivió a lo largo de 2022, es razonable” que los registros de 2024 acaben enfilándose por encima de los de entonces.
Como ya sucediera en enero, la asociación identifica “un tráfico internacional boyante” que se está beneficiando primordialmente del comercio online, aunque “posiblemente y en menor medida” también lo haga “de un interés renacido por el transporte aéreo ante los crecientes problemas de capacidad que vive el marítimo”. IATA no menciona directamente la crisis del Mar Rojo o los problemas en el Canal de Panamá en este punto, pero sí que se refiere a ellos para señalar, en cambio, que no se está detectando un efecto de la crisis en Oriente Medio en relación a los rendimientos económicos de la carga aérea, que han descendido el 18,3% anualmente y siguen a la baja, ya que son el 1,5% menores que en enero. “La mejora de competitividad de los precios de transporte aéreo en relación al transporte de contenedores por la crisis no se ha materializado en un aumento de los rendimientos económicos”, sostiene la asociación de aerolíneas.
Con todo, la demanda de carga aérea sigue en la misma racha que enero, es decir, creciendo a una mayor velocidad que los principales indicadores industriales y mercantiles que usa IATA para pronosticar su evolución. La producción global industrial de enero ya reveló una evolución muy similar a la de 2023, mientras que el crecimiento del comercio global transfronterizo en el primer mes del año fue del 0,4% interanual, el más alto en diez meses “pero todavía bien por debajo de los picos postpandemia alcanzados en 2022”, manifiesta la entidad. Este decalaje también se replica en el bajo dinamismo de índices que IATA suele consultar, como el de los Gerentes de Compras (PMI por sus singlas en inglés): “La demanda de carga aérea contrasta con las expectativas en contracción de nuevos pedidos de exportación por parte de los gerentes, y también con el lento crecimiento de nueva producción, es decir, la industria experimenta una demanda que se incrementa muy rápido pese a indicadores relativamente blandos”, resume IATA. Por ello, su principal apuesta es el ecommerce.
Las aerolíneas africanas han sido esta vez las que han liderado los crecimientos en demanda, con el 22% interanual en positivo. Han sido primordialmente las líneas por dentro del continente las que han incrementado sus toneladas-kilómetro, con un aumento interanual del 42% en febrero. Les siguen las de Oriente Medio, que ya encabezaron el ranking en enero y ahora crecen el 20,9%. “El mercado entre Oriente Medio y Europa es el que ha tenido más fuerza, con un incremento del 39,3%”, según cifra IATA. Asia, que acumula la mayor cuota de mercado global (33,3%), ha crecido el 11,9%, un porcentaje menor que el de enero, “probablemente por la ralentización de la actividad en el periodo de celebración del Año Nuevo Lunar”, especifica la asociación.
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