Barcelona, 19 de julio de 2022.- Suiza ha presupuestado y planificado un proyecto de infraestructura colosal para llevar bajo tierra gran parte del transporte de mercancías terrestre. Sus características y plazos de ejecución sorprenden:
Según informa Xataka, el proyecto, denominado Cargo Sous Terrain (CST), lleva ya algún tiempo sobre la mesa; pero es ahora, tras años de planificación, cuando parece concretarse al fin con pasos importantes. A finales de 2021 el Parlamento suizo fijó un marco legal que permitirá arrancar el proyecto ya en agosto. Por lo pronto, sus responsables han trazado un cronograma bien definido: quieren inaugurar un primer tramo en cuestión de una década, en 2031, y tener toda la red completa para 2045.
“La primera sección de la red se extenderá desde Härkingen-Niederbipp hasta Zúrich y tiene una longitud de unos 70 km y diez puntos de conexión. La expansión hacia otros centros logísticos y de distribución clave dentro de Suiza continuará de forma progresiva. Hasta 2045 se creará una red total de 500 km de longitud entre los lagos Constanza y Ginebra, con ramales a Basilea, Lucerna y Thun”, señalan sus impulsores. Solo el coste global de la primera sección, incluido el software y toda maquinaría, ronda los 3.000 millones de francos suizos, unos 3.044 millones de euros.
Para completar toda la red suiza se calcula que la inversión rondará los 30.000 millones de francos suizos, una cantidad ingente de fondos que —recalcan sus autores— partirá del propio mercado y el sector privado. “CST es una iniciativa del sector privado. No se utilizan subvenciones para la construcción de la infraestructura y la explotación del túnel», explican.
La idea que tienen en mente sus autores pasa por tejer una enorme red, un sistema logístico para el transporte de mercancías con túneles que conecten los centros de producción y hubs con los núcleos urbanos. La carga se moverá con un sistema automatizado y vehículos ecológicos y eléctricos, sin conductores, que se desplazan sobre raíles y en túneles de tres vías a alrededor de 30 km/h.
“El 100% de la energía provendrá de fuentes renovables”, defienden sus creadores. El diseño permite mover carga fresca y refrigerada y prevé también un sistema elevado, a la altura del techo del túnel, para desplazar de forma más rápida los paquetes de menor tamaño y peso.
Aunque al Cargo sous terrain le queda todo por demostrar y su ejecución no parece sencilla, los cálculos de partida resultan bastante prometedores. Estiman que el tráfico de mercancías pesadas en las carreteras descenderá un 40% y al trasladar el tráfico al sistema subterráneo se desplomarán tanto los niveles de contaminación acústica como las emisiones de dióxido de carbono.




